La planificación de la inversión basada en objetivos. El proceso consta de 5 fases:
# 1 Definir posible objetivos financieros
# 2 Identificar actual y futuros recursos disponibles
# 4 Implemente el plan ahora no lo dejes para mañana
En otra publicación explicamos la justificación y los beneficios de hacer riqueza e inversiones. gestión guiada por objetivos financieros. En este post veremos cómo es esto hecho en la práctica.
El proceso de planificación de inversión basado en objetivos comprende 5 fases
El plan financiero personal debe ser un ejercicio interactivo de ajuste entre lo que queremos y lo que podemos lograr, y debe comprender 5 fases:
- Definir los objetivos financieros;
- Identificar los disponibles. recursos financieros, es decir, evaluar la situación financiera actual y el proyecto capacidad financiera predecible;
- Determinar la estrategia por elegir la asignación de activos que guiará la selección de inversiones;
- Implemente el plan por seleccionando y haciendo inversiones concretas;
- Evaluar el progreso, o monitorear la evolución y revisar el ejercicio.
Fuente: Instituto CFA
Como sabemos, el capital que tenemos a lo largo de nuestras vidas – ahorros acumulados y el ingreso futuro – es escaso y los objetivos personales son múltiples y competitivos juntos.
Por lo tanto, para que el plan financiero individual sea realista, debemos comenzar definiendo cada uno de los objetivos, considerando la capacidad financiera presente y futura, los llamados recursos disponibles. Se basa en conciliar objetivos y recursos que podemos determinar estrategias de inversión.
# 1 Definir posibles objetivos financieros
Los objetivos financieros deben ser realistas, priorizados y programados en la fecha objetivo.
En términos de prioridades, en todos los objetivos tenemos necesidades, intereses y aspiraciones según su nivel de crítica.
En términos del horizonte de tiempo, tenemos a corto plazo (hasta 2 años), mediano plazo (2 a 10 años) y objetivos a largo plazo (más de 10 años).
Por ejemplo, en objetivos a corto plazo, tenemos deudas de alto costo o gastos imprevistos como gastos médicos, de reparación de viviendas o automóviles.
En los objetivos a medio plazo que encontramos, por ejemplo, el establecimiento de una reserva o fondo de emergencia para tratar gastos y situaciones inesperados e imprevistos o para dar la cantidad por adelantado para la compra de una casa
En los objetivos a largo plazo tenemos, entre otros, el jubilación y los derechos de matrícula de los niños.
Fuente: FINRA – Financiera Autoridad reguladora de la industria
# 2 Identificar los recursos disponibles
Para evaluar los recursos disponibles, necesitamos construir sobre nuestra situación y capacidad financiera, que incluye:
- Actual activos financieros netos (saldo entre activos y pasivos financieros);
- Futuro contribuciones previsibles Dependen de los ingresos y gastos esperados, y la capacidad de ahorro y, por lo tanto, se necesita un presupuesto financiero.
Lo diagrama de flujos de riqueza personal, que contiene las fuentes y usos de ingresos, se aplica a todos nosotros.
Tenemos las fuentes de riqueza o riqueza. generación, que comprende los ingresos obtenidos, pensiones sociales y privadas y las herencias recibidas. Y también tenemos los usos o gastos de la riqueza, que incluyen gastos, seguros, impuestos y herencias otorgadas.
La diferencia entre los ingresos provenientes y los gastos realizados son ahorros, que pueden colocarse en depósitos o cuentas de ahorro, o invertirse en finanzas bienes. También hay ahorros negativos, que son todas nuestras deudas.
Fuente: hoganfinancial.com
Nosotros debemos recopilar, analizar y evaluar la información de nuestra situación, condición y capacidad financiera general, presente y futuro.
Hay un conjunto de simuladores disponibles en Internet, así como aplicaciones de festión de dinero para teléfonos inteligentes, que nos permiten equilibrar o presupuestar nuestras finanzas, como así como evaluar y controlar nuestro presupuesto financiero, incluso permitiéndonos ver donde podemos ahorrar más.
# 3 Determinar la estrategia adecuada para el distribución de capital entre ahorros e inversiones, de acuerdo con sus características y condiciones personales, y dirigido a lograr objetivos
Determinar la estrategia incluye los siguientes pasos:
- Distribuir recursos por objetivos;
- Distribuir dinero o capital entre ahorros (depósitos y cuentas de ahorro) y inversiones;
- Hacer la distribución de inversiones por activos y clases y subclases financieras.
La asignación de recursos a los objetivos es distribuir el escaso capital por objetivos múltiples, centrándose así en las prioridades.
La distribución de recursos entre ahorros e inversiones está determinada por período de inversión porque, como hemos visto anteriormente, a corto plazo (plazo menos de 2 años), la opción más adecuada son los ahorros, mientras que para el medio y largo plazo, la elección correcta son las inversiones.
La asignación de inversiones por clases de activos y subclases, incluso entre acciones y bonos, y sus segmentos, se derivan de su rentabilidad esperada y riesgo, el límite de tiempo para cumplir los objetivos y nuestro perfil de riesgo en términos de preservación o apreciación del capital (que comprende tanto el capacidad de asumir riesgos y nuestra tolerancia al riesgo).
Este trabajo permite proyectar las tasas de retorno esperadas para la inversión carteras de cada objetivo, y de esta manera, determinar la capacidad de lograr el objetivo de capital acumulado dentro del período definido y que capital que debemos llevar a cabo en cada momento del tiempo.
# 4 Implementar el plan ahora, no lo dejar para mañana
Teniendo decidió distribuir el capital disponible entre ahorros e inversiones, y en estos por subclases de activos, el siguiente paso es realizar inversiones.
¿Cuando? De inmediato porque no hay mejores momentos.
¿Cómo? En ahorro se trata de hacer colocaciones donde nos sentimos más seguros. En cuanto a las inversiones, la selección implica una diversificación eficiente entre las subclases de activos y la elección de los productos más representativos de esta clase y menor costo.
Si hacemos bien todos estos pasos, se cumplen las condiciones para inversiones exitosas.
# 5 Reevaluar el progreso cada seis meses, o al menos anualmente, alineándolo con las circunstancias personales
¿Cuando? Idealmente, cada seis meses o al menos anualmente.
¿Cómo? La idea principal es mantener el rumbo y evitar actuar dependiendo del ruido del mercado. La excepción es si hay un cambio en las circunstancias personales que justifique o incluso requiere la revisión y reformulación de algunos de los objetivos.
Se desarrollarán estas 5 temas en los artículos que se publicarán a continuación.